Estamos en pleno marzo, un mes donde los vinos de cosechero se muestran en todo su esplendor. Es una época en la que estos tintos de año alcanzan su culmen, plenos, potentes, incontestables en su juventud. Y es también el momento oportuno en el que constatar si la decisión que se tomó en octubre fue la acertada: ¿despalillado o maceración carbónica? O la tercera vía, ¿mitad y mitad? Sigue leyendo